A FONDO…

Los pasos de este gallego de Santiago de Compostela fueron concluir la carrera de ingeniero naval un 6 de noviembre y un 16 estaba trabajando en la Compañía en Barcelona. Diez días le separaron entre la teoría universitaria y la realidad naviera de la más grande. Pero ojo, que tenemos a un ingeniero con tintes poéticos, racional y bucólico a partes iguales. Lleva puesta la bandera del Centenario con el gallardete del escudo original en su corbata.

Explotación… ¿en qué se traduce?
La analogía en el mundo empresarial es la dirección de operaciones. Nos dedicamos a generar trayectos, optimizar el espacio en la bodegas, evitar que los barcos se paren, proyectar las varadas para los mantenimientos, gestionar fletamentos, tripulaciones, combustible… En definitiva, asegurar la continuidad operativa de la flota.

Qué es lo más complejo
Como siempre las personas. Saber poner en una balanza la experiencia y el trabajo en equipo. En esta Compañía contamos con los mejores profesionales del mundo en ferrys, hay pocas compañías con este bagaje.

¿Cuánto se invierte en explotación?
Tenemos unos 200 millones de euros de gasto recurrente anual. De lo0s cuales 50 millones los destinamos a consumo de combustible, 40 a fletamentos, 65 a mantenimientos y el resto dedicado a operaciones del buque en puerto.

¿Es una unidad de gasto?
Lo que es la parte de la naviera si, pero tiene sociedades dependientes que son también unidades de ingreso. Por ejemplo la terminal Ferry de Barcelona o la consignataria Agencia Marítima Transhispánica. También tenemos líneas de negocio de atención a terceros armadores, como en el puerto de Valencia, donde operamos el 100% de las escalas de cruceros.

¿De dónde parte la propuesta de la adquisición de buques?
Nace de las necesidades de la Compañía y de los planes Estratégicos consensuados con el Accionista, pero se consulta a la dirección de explotación, como expertos en la materia.

Dos comités de Dirección al mes.
Sí, uno de resultados al cierre del mes con una previsión de lo que va a suceder y otro de transformación. Trabajamos con un mapa de proyectos alineados en los que intervienen distintos departamentos liderados por uno de ellos. Se percibe que el Comité de Dirección estamos más cerca de lo que tradicionalmente estuvimos del resto de la compañía. Ese es el gran cambio.

Es estresante su cargo.
Bastante.

¿Cómo se gestiona?
Tengo la suerte de contar con tres de las personas con más experiencia en la Compañía: la dirección de flota, Abel Aleixandre capitán con 35 años y capitán de capitanes, Agustín Aguilera, jefe de máquinas y Director Técnico, otros 40 años. No había nacido yo y ya estaría él construyendo barcos en Japón, y Manuel Baeza, capitán de la Marina Mercante que lleva la dirección de operaciones. Es un trípode que soporta la tensión operativa de la compañía de una manera ejemplar.

¿Qué le da la alegría de venir a trabajar cada día?
Es una ilusión trabajar en mi sector, en el puesto más ambicioso para un ingeniero naval, en la mayor naviera de España y sobe todo compartir con el grupo de personas con el que lo comparto.

Ambiciones para Explotación
El gran reto es la renovación de la flota y la modernización de nuestros buques.